Celebrando el día del padre.

El miércoles, como ya sabéis fue el día del padre oficialmente, digo oficialmente porque para mi estas celebraciones me resultan un poco extrañas. Para mi todos los días son el día del padre, el día de la madre, el día de los enamorados...Hay que celebrarlo todos los días del año.
Pero bueno, la cosa está así montada y la verdad es que cuando tienes a una niña pequeña revoloteando por casa es inevitable celebrar un día como éste. Incluso en la guardería le prepararon una sorpresa para papá...

Estuve pensando qué regalarle a Rubén, muchas opciones pasaron por mi cabeza y al final me decidí por algo muy sencillo y apetitoso.
Qué mejor manera de empezar el día con un buen desayuno y acompañado de un buen libro....
El libro que elegí para que Noa se lo regalara a Papi es Tinc un pare genial (Tengo un padre genial) de Ross Collins y la Editorial Blume.

Me decidí por este libro porque me pareció una historia muy divertida. Un pequeño cocodrilo quiere saber cuál es la mayor virtud de su padre. Por el camino se encuentra a sus amigos lo cuales ya lo tienen muy claro. Cada uno de ellos se siente plenamente orgulloso de su padre y desde luego de mayores quieren ser como ellos.

¿Conseguirá el pequeño cocodrilo resolver su duda?

Cuando llegó la hora de ir a dormir Noa fue en busca del nuevo libro de papi y padre e hija tuvieron su momento de lectura mientras mami les hacía alguna foto...

 

A Rubén le encantó levantarse y encontrar su tarta de chocolate preferida preparada con un café con leche calentito... todo acompañado de un divertido libro, del que disfrutó tanto como Noa.

A veces las cosas más simples son las que hacen que la vida se llene de color.

¡Feliz viernes!

Zaira